Tres tiempos vividos en solo una semana

Tres imágenes, tres tiempos condensan la semana y la era en que vivimos . Un viaje al futuro, el nuevo presente que llegó para quedarse y el viejo pasado que se resiste a ir. El amartizaje que tal vez nos anticipe el provenir de la Tierra o quizá nos permita evitarlo volvió a recuperar la ilusión que los viajes espaciales siempre generaron. Hasta cuando solo eran ciencia ficción. El regreso a las escuelas, después de un año de triste ausencia, nos confirmó la nueva normalidad, lo que es y seguirá siendo por un buen tiempo. Los chicos, los padres y las ciudades recuperaron la vitalidad contagiosa del reencuentro, del aprendizaje compartido, del desafío de recuperar lo perdido y ganar futuro.

Pero a los motivos para la esperanza siempre los acechan causas para el desconsuelo. Como los vergonzosos vacunatorios VIP, que la política habilitó para los propios. El pasado que vuelve. Miserias que perduran. Imperdonable falta de creatividad. Como se preguntaba Bertrand Russell, “¿Para qué repetir los errores antiguos habiendo tantos errores nuevos que cometer?

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