La cesión de los derechos de TV tendría también sus encontronazos

Las agotadoras maniobras que desembocaron en el acuerdo que posibilita el regreso del fútbol desplazó a un segundo plano la definición en torno a la cesión de los derechos audiovisuales, una operación clave para asegurar el flujo de capitales que permita sostener la actividad. Ayer se abrieron los sobres con las propuestas, presentadas el pasado 20 de febrero, de los tres oferentes (Fox/Turner, ESPN y Mediapro), en el estudio Bruchou, y el dictamen de la Comisión Audiovisual de la AFA se conocerá recién el próximo lunes, como estaba previsto. Pero esa decisión deberá ser refrendada por una asamblea.

La decisión se vino postergando porque las empresas debieron aportar precisiones posteriores a las ofertas en torno a 17 puntos que fueron objetados. Los ítems que fueron cuestionados por la Comisión Audiovisual involucraban desde el merchandising hasta la publicidad estática en los estadios en los que se jueguen los partidos de Primera.

Las versiones circulantes sobre la ausencia de un único ganador de la licitación son persistentes. Al Gobierno, que acaba de rescindir el contrato del Fútbol para Todos, no le caería nada mal que hubiera un reparto entre todos los oferentes. Una posibilidad que no le resultaría simpática a dos de los tres oferentes.

Fox es una de ellas y jugaría una carta de máxima: salir del escenario en ciernes. Su propuesta hacía eje en el pay per view y ofrecía 3200 millones de pesos para el primer año de contrato.

ESPN ofertó una cantidad algo menor para el primer año, 3000 millones de pesos, pero con un incremento basado en la actualización de la tarifa del cable, que llevaba la cifra a 6783 millones para 2026; la propuesta ofrecía partidos tanto en el abono básico como en el Premium. Por último, la oferta de Mediapro se parece bastante en lo económico a la de ESPN, pero apunta a emitir todos los partidos en canales codificados de alta definición.

Según una de las versiones, los derechos se repartirían de la siguiente forma: 40 por ciento para ESPN, 30 por ciento para Fox, 30 por ciento para Turner, con la producción televisiva compartida entre Torneos y Mediapro. Un reparto que dejaría más heridos que vencedores.

Una vez que se defina el esquema, las empresas dispondrán de cinco días para firmar los contratos y depositar la llave de 1200 millones de pesos. Una cifra que el fútbol mira con interés, porque resulta imprescindible para poner al día a los futbolistas a los que todavía se les adeudan sueldos atrasados.

Fuente: La Nación