Para repensar la Bauhaus y su marca en el presente

Un grupo de artistas que en 2015 coincidieron en el Museo Municipal de Bellas Artes Juan Sánchez en la provincia de Río Negro se vuelven a reunir ahora en Buenos Aires, reeditando una interesante propuesta bajo el sugerente título de Celebración y Naufragio.Michelle Siquot. Ensayo para la Bauhaus I, 2015. cintas de algodon. 128 x 80 cm. Gentileza Macba.Michelle Siquot. Ensayo para la Bauhaus I, 2015. cintas de algodon. 128 x 80 cm. Gentileza Macba.

Se trata de una muestra que evidencia ciertas huellas –tanto teóricas como productivas– que fueron parte de la Bauhaus, escuela de arquitectura, diseño, artesanía y arte fundada en 1919 por Walter Gropius en Weimar (Alemania).

La participación de Eduard Arbós, Rafel G. Bianchi, Regina Giménez por España y Gonzalo Elvira, Alicia Herrero y Michele Siquot por la Argentina amplía ahora la convocatoria inicial, gracias a una invitación conjunta del Museo de Arte Contemporáneo de Buenos Aires (MACBA), junto al Centro Cultural de España en Buenos Aires (CCEBA) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID).

Los artistas ocupan los cuatro pisos del museo con una serie de propuestas que conforman un interesante diálogo, con eje en la interpretación y relecturas que cada uno de ellos hizo del legado estético e ideológico de la Bauhaus desde una «revisión libre, no exenta de ironías ni reapropiaciones evidentes» como se aclara en la gacetilla.

En Barcelona, de donde previenen los españoles Arbós, Bianchi y Giménez junto al artista neuquino Gonzalo Elvira, radicado en esa ciudad desde el 2000, este grupo mantiene una comunicación fluida.Regina Gime´nez. Geo-grafics 2020 acrilico sobre algodon. Gentileza Macba.Regina Gime´nez. Geo-grafics 2020 acrilico sobre algodon. Gentileza Macba.

David Armengol, director artístico del centro de arte La Capella invitado nuevamente a escribir el texto, pondera las singularidades de la muestra que lleva el subtítulo de «Ejercicios sobre la Bauhaus»: «Celebración y Naufragio es un juego de contrarios, un festejo eufórico que mantiene cierta tensión dramática. La fascinación entusiasta por aquello que no sale como esperábamos, la expectativa del éxito unida irremediablemente al acecho constante del fracaso. La estética y la función, la creencia y el descrédito, la ilusión y la decepción como posibles vías de investigación desde el trabajo en arte».

La vigencia de un legado

En la recorrida de prensa, se conversó sobre la vigencia de este legado en España y se admitió que solo se estudia como algo inscripto en la historia, mientras que tanto Alicia Herrero, quien se formó en los 70 en la Universidad Nacional de La Plata como Gonzalo Elvira, que lo completó en los 80 en Río Negro, coinciden en que su formación contenía bases de ese verdadero programa formativo abierto tanto a los oficios como las teorías.

En la planta baja, un retrato de Gropius realizado con la curiosa técnica que usa el artista Gonzalo Elvira (Neuquén, Argentina,1971) a partir de una trama de líneas hechas con plumín, da la bienvenida al espectador, introduciendo parte de otros trabajos sobre papel del artista radicado en Barcelona.

Se suma una parte del despliegue de obra reciente de Alicia Herrero (Buenos Aires, Argentina, 1954), Vanitas y Cotidianomía todas de 2021-2022, descriptas como «deconstrucciones de diagramas de flujos de capital, sometidos a diversas aventuras formales, que se expanden mediante variantes de materialidad (duro/blando, maderas, lienzos colgantes, colores, tramas de metal), más allá de sí mismas» en un estilo propio que la caracteriza.Gonzalo elvira. Gropius. 2016. Tinta china sobre papel Britania. 70 x 50 cm.  Gentileza Macba.Gonzalo elvira. Gropius. 2016. Tinta china sobre papel Britania. 70 x 50 cm. Gentileza Macba.

Sobre la rampa de acceso a la primera planta tres enormes lienzos de Regina Giménez (Barcelona, España, 1966) hechos sobre los paños que cubren la parte no visible de las alfombras. Siguiendo una cuadrícula reticulada, una composición fusiona ciertas convenciones gráficas y conceptuales basadas en investigaciones sobre el color e inspiradas en autores como Klee, Kandinsky, Itten, Goethe o Newton.

Este sector se asocia con otra obra que ocupa el remanso de rampa, donde interpreta bajo la forma de unos triángulos, la seriación de alturas de las montañas del mundo. Así, dialoga con las obras de Herrero en el placer de la trasposición de datos.

La artista e ilustradora argentina Michele Siquot (Rosario, Argentina,1964) usa el textil como forma de homenaje a Günta Stolzi, una de las pocas mujeres profesoras de la Bauhaus y la primera en ostentar el título de «Maestra», que tipifica el estilo distintivo de los textiles de la escuela alemana.

Bajo distintos guiños, borda en servilletas mujeres con sus faldas desplegadas, o reproduce las teorías del color de Kandinsky, mediante la combinación de tiras de algodón de diversos colores. En una interpretación que combina lo doméstico con lo conceptual, sus obras sin estridencias declaran sus principios con ironía velada.

Lo mismo pasa con el despliegue de una selección de nueve obras de Herrero, la serie Mi Botín, exhibida por primera vez en el Centro Cultural Rojas en 1997, en las que reproduce una serie de modelos –tomados de distintas publicaciones– de objetos de diseño para uso doméstico que la artista recrea –tal como podrían verse en las páginas de un libro– para ejercer una operación de apropiación y desclasificación con sesgo anticolonial.

Rafel G. Bianchi (Olot, España, 1967) juega en dos niveles. En uno, deconstruyendo la mesa de escritorio diseñada por Albers en 1923, «La Table for anteroom to Director’s Office» para convertirla en un nuevo mueble: «la Silla Robinson». Un giro conceptual para introducir a Robinson Crusoe que, en su condición de náufrago, se ve obligado a construir con lo que tiene. Por otro lado, aparecen los loros, que en su obra también refieren al mismo cuento, usando ciertas operaciones que los ocultan y los hace protestar por eso mismo.https://428b96c4b313e8ed34cce2537dedf24a.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-40/html/container.htmlRafel G. Bianchi. Silla Robinson, 2013-2024. Madera y papel. Medidas variables. Gentileza Macba.Rafel G. Bianchi. Silla Robinson, 2013-2024. Madera y papel. Medidas variables. Gentileza Macba.

Más cercano a la arquitectura, Eduard Arbós (Barcelona, España,1959) realiza cruces entre planos y pintura a partir de «Casa del artista» (2015), pero amplifica sus derivas usando unos esquemas gráficos que funcionan como un código constructivo inventado, que es trasladado a partitura musical por intervención de otro argentino radicado en España, Carlos Falanga.

El mismo músico es quien trabaja esas relaciones entre obra y sonido con la pieza de Gonzalo Elvira cuando partiendo del «Monumento a los caídos de marzo» construido por Gropius en 1922 en Weimar y posteriormente destruido por los nazis, dedicado a los obreros desconocidos que en 1920 fueron asesinados en una manifestación pacífica, realiza una serie de obras sobre papel.

Estos fluidos intercambios de lenguajes, de presentación de códigos y representaciones en pintura, dibujo, objeto y textiles que confluyen entre los artistas de Celebración y Naufragio permiten incorporar un repertorio de conocimientos ampliados, bajo el amparo de aquello que Armengol describe como una interrogación de los límites entre concepto y experiencia, entre utopía y realidad.


Sobre la firma

Pilar Altilio

Fuente: Clarín.com

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