Brasil: el arte de la diplomacia y una expo en Londres bajo las bombas

14-3-2024 cultura CULTURA EL ARTE DE LA DIPLOMACIA pelicula documental arte brasilero segunda guerra mundial MUSEO MALBA EMBAJADOR BRASIL DIRECTOR INVESTIGADOR FOTOS MARTIN BONETTO

A finales de la Segunda Guerra, en 1944, Brasil envió por barco 168 pinturas donadas por 70 artistas, entre ellos, Cândido Portinari, Tarsila do Amaral, Di Cavalcanti, Burle Marx, Iberê Camargo, para ser exhibidas y subastadas en algunas de las instituciones de arte más destacadas del Reino Unido.

La iniciativa partió de dos artistas, en un fascinante episodio de diplomacia cultural, que mostraba el apoyo de Brasil a la lucha contra el fascismo y, a la vez, daba a conocer el arte brasileño.

La “Exposición de Pintura Brasileña Moderna”, en 1944 y 1945 fue la primera muestra colectiva de arte brasileño mostrada en Gran Bretaña y la mayor enviada por Brasil al exterior hasta entonces.Abaporu, la obra de Tarsila do Amaral. Ella participó en esa expo. Abaporu, la obra de Tarsila do Amaral. Ella participó en esa expo.

La Tate Gallery había sido bombardeada, la National Gallery permanecía casi siempre cerrada, por lo que la Royal Academy of Arts fue el lugar elegido. Luego intineró a otras ciudades: Norwich, Reading, Manchester, Bristol, Bath, Glasgow y Edimburgo.

La exposición se montó en menos de un mes y ocupó tres salonesEl público londinense llenó el lugar. Un total de 47 pinturas fueron vendidas en la primera noche, el 22 de noviembre de 1944. En total se vendieron 80. El dinero recaudado fue donado a la Fuerza Aérea Británica, que enfrentaba al ejército de Hitler.

Durante la muestra asistieron unas 100.000 personas, un récord incluso para los estándares de la época, entre ellas la misma Reina Consorte, conocida como la Reina Madre. En tiempos sombríos, el arte volvía a brillar.

Una obra que correspondía con el imaginario pintoresco y de playas tropicales fue adquirida por la Tate Gallery, una de las instituciones del arte más importantes del mundo, para comenzar su colección de pintura brasileña. El autor era José Cardoso Junior, un artista que empezó a pintar después de los 80 años.

Otra de Burle Marx fue comprada por el viceministro de la Aeronáutica, Lord Sherwood; hoy se encuentra en una colección privada. Otra obra de Tarsila do Amaral fue adquirida por el propietario de la revista de arte Horizon y un diplomático brasileño compró un Portinari.

«Lucy con una flor», de Lasar Segall, que se encuentra hoy en la Galería Nacional de Arte Moderno de Escocia, fue la obra considerada por la crítica como la mejor; otra, de Portinari, alcanzó el mayor precio.

La exposición tenía todos los elementos del llamado soft power el poder blando, o diplomacia cultural–, entendiéndolo como el potencial de un país para influir en otros a través de su capacidad de inspiración y atracción, en contraposición al poder político o militar.

En el MALBA en Buenos Aires, se proyectó la semana pasada El arte de la diplomacia, el film del cineasta Zeca Brito, basada en los hechos de 1944, una posterior muestra en la embajada de Brasil en Londres en 2018 y en el libro Public Diplomacy on the Front Line The Exhibition of Modern Brazilian Paintings, de Hayle Gadelha, quien ha sido en estos últimos años el agregado cultural de Brasil en Argentina. Gadelha acaba de regresar a su país, al final de su período.El Embajador de Brasil, Julio Glinternick Bitelli en el centro.   A su derecha, el realizador Zeca Brito, y el agregado cultural, Hayle Gadelha. En el Malba, junto al afiche el día del estreno. 
Foto Martín BonettoEl Embajador de Brasil, Julio Glinternick Bitelli en el centro. A su derecha, el realizador Zeca Brito, y el agregado cultural, Hayle Gadelha. En el Malba, junto al afiche el día del estreno. Foto Martín Bonetto

Tanto la película como el libro revelan nuevos significados para el arte moderno brasileño de la época, e indagan en la astucia e importancia de este gesto diplomático, en un marco de altísima tensión europea, y las razones de que esta historia haya caído un poco en el olvido.

Además de recorrer los lugares donde están actualmente las obras –, algunas nunca fueron colgadas o están en colecciones particulares–, la película asume un papel de rescate, con la opinión de diferentes críticos e historiadores del arte, entre ellos Aracy Amaral, quien fuera directora de la Pinacoteca del Estado de São Paulo y del Museo de Arte Contemporáneo. También participa la inglesa Dawn Adès, fideicomisaria de la Tate, de la National Gallery y de la Fundación Henry Moore, así como familiares de los artistas que participaron de la expo en Inglaterra, entre otros.Cien mil visitantes tuvo la expo. Un total de 47 pinturas fueron vendidas en la primera noche, el 22 de noviembre de 1944. En total, se vendieron 80 piezas. 
Foto Martin BonettoCien mil visitantes tuvo la expo. Un total de 47 pinturas fueron vendidas en la primera noche, el 22 de noviembre de 1944. En total, se vendieron 80 piezas. Foto Martin Bonetto

La película insiste en que la mayoría de las obras enviadas rompía con los esquemas folclóricos que existían sobre Brasil, en el Reino Unido. En el año 1944 estaba fresco el recuerdo de la exposición «Arte Degenerado», organizada a pedido de Hitler, el “más perverso rechazo a la pintura modernista que un régimen del siglo XX llegaría a hacer”, según varios críticos. Esta muestra fue el más acabado ejemplo de escrache público de un gobierno a los artistas considerados opositores al nazismo."As Mulatas", la obra del artista Di Cavalcanti, ubicada en la entrada del Palacio Presidencial de Planalto,  en Brasilia, vandalizada en el conato de golpe contra el presidente Lula. Enero de 2023.
AP Photo/Eraldo Peres«As Mulatas», la obra del artista Di Cavalcanti, ubicada en la entrada del Palacio Presidencial de Planalto, en Brasilia, vandalizada en el conato de golpe contra el presidente Lula. Enero de 2023. AP Photo/Eraldo Peres

El arte de la diplomacia comenzó a filmarse en 2018, el mismo año en que la muestra en la sede de la embajada de Brasil en Londres rememoró ese acontecimiento, puesto nuevamente en foco. La última escena se filmó el 8 de enero de 2023, cuando una obra de Emiliano Di Cavalcanti, quien participó de en 1944, era vandalizada en el intento del golpe de Estado en el Palacio de Planalto, Brasilia.

En Buenos Aires, en sus últimos días como agregado en Argentina, el diplomático Hayle Gadelha, promotor del rescate y autor del mencionado estudio, cuenta: “Cuando llegué a Londres, en 2014, para trabajar como agregado cultural en la Embajada de Brasil, el embajador me pidió que investigara sobre la muestra de 1944″.El óleo "Inmigrantes III", de Lasar Segal, pintor brasileño de origen lituano. Una obra de la colección Costantini en el Malba. Una obra suya fue vendida en la expo de Londres. 
AFP PHOTO/Daniel GARCIAEl óleo «Inmigrantes III», de Lasar Segal, pintor brasileño de origen lituano. Una obra de la colección Costantini en el Malba. Una obra suya fue vendida en la expo de Londres. AFP PHOTO/Daniel GARCIAMirá también

Reaparece en Cuba una medalla, botín de un robo célebre en Francia en 1831

Reaparece en Cuba una medalla, botín de un robo célebre en Francia en 1831

«El primer documento sobre la exposición que leí –rememora– fue su catálogo, que era muy pequeño porque en tiempos de guerra no había papel, pero con mucha calidad gráfica y textos realmente interesantes. Al leerlo, me quedó claro que había una contradicción entre la forma en que los artistas brasileños eran vistos como parte de la vanguardia moderna internacional y cómo eran percibidos por los críticos británicos. El público inglés tampoco estaba acostumbrado al arte brasileño y no esperaba encontrar obras que escapaban a los estereotipos y a la sensualidad».Al micrófono, el cineasta Zeca Brito. Lo acompaña el autor del ensayo histórico, el agregado Hayle Gadelha. En el Malba. Foto Martín BonettoAl micrófono, el cineasta Zeca Brito. Lo acompaña el autor del ensayo histórico, el agregado Hayle Gadelha. En el Malba. Foto Martín Bonetto

“Me fascinó tanto la historia que comencé una larga investigación que me llevó a varios países, a unas 15 ciudades y a documentos que nunca habían sido investigados juntos. En la embajada brasileña en Londres en el 2018 organizamos una exposición conmemorativa de la exposición original de 1944; allí exhibimos 25 de las pinturas originales que nos fueron prestadas por los propietarios. Poco después decidí escribir una tesis doctoral sobre cómo la política exterior brasileña utilizó no sólo a las fuerzas armadas, sino también el arte moderno para participar en los esfuerzos bélicos durante la Segunda Guerra y cómo estos artistas y obras influyeron en la composición geopolítica y posicionaron simbólicamente a Brasil en ese tiempo”.

Identificado con un cine memorialista, Zeca Brito es cineasta y trabaja como director, productor y guionista, siempre relacionado con la investigación artística y la reflexión política. Ha dirigido y guionado cortometrajes y largometrajes premiados en Brasil y en el extranjero, como Glauco do Brasil, A vida Extra-Ordinaria de Tarso de Castro, Grupo de Bagé, Trinta Povos y Hamlet.Mirá también

Falsos y recontra falsos: un manual de fraudes del arte

Falsos y recontra falsos: un manual de fraudes del arte

“Lo que hicimos –dice– por una parte fue investigar el modernismo brasileño en su primer estudio de internacionalización, y por otra, mostrar cómo un hecho de diplomacia cultural puede influir en la situación política en medio de una guerra. Hicimos un recorrido por las instituciones que guardan estas imágenes y contribuimos a una revisión histórica de cómo se veían antes y se aprecian hoy artistas que participaron, como Portinari, Di Cavalcanti y Tarsila do Amaral y otros que pasaron por varias catalogaciones.https://e0d6b4a16bc42470c1df37780c710c30.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-40/html/container.html

“En el caso de la película, se destacan mucho dos artistas entonces clasificados como naif y hoy considerados modernos, como Héctor de los Prazeres y José Cardozo Jr. Cardozinho.

Héctor de los Prazeres era el único afrodescendiente en la exposición de 1944. Sus obras fueron adquiridas por el MoMA y hoy tiene un papel muy importante para pensar el modernismo brasileño, principalmente por las cuestiones afirmativas étnicas que trae en sus personajes, temáticas e iconografía. Y el otro sería Cardozinho, cuya pintura es la primera adquisición de una obra latinoamericana por parte de la Tate Gallery, una obra que no correspondía exactamente a la realidad del Brasil pero venía a agradar al imaginario del público de la época.

“Es importante cuando el arte puede ser clasificado como enemigo de los regímenes autoritarios y antidemocráticos, como un antídoto contra el nazismo y las ideas oscuras de la humanidad”, concluye el diplomático.


Sobre la firma

Claribel Terré Morell

Fuente: Clarín.com

Sea el primero en comentar en "Brasil: el arte de la diplomacia y una expo en Londres bajo las bombas"

Deje un comentario

Su email no será publicado


*