En su visita por latinoamerica que comenzó por Ecuador con una agenda muy cargada, el Papa se reunió con el presidente de dicho país, Rafael Correa, con el cual mantuvieron un encuentro en una visita al palacio presidencial.
El lunes estuvo en la catedral de Quito, en donde dirigió unas breves palabras a los presentes y pidió que «no haya diferencias, no haya excluidos y que no haya gente que se descarte y todos sean hermanos». Y continuó con un mensaje improvisado que no estaba preparado»Les voy a dar la bendición para cada uno de ustedes y para sus familias para todos los seres queridos y para este gran y noble pueblo ecuatoriano».
El Papa llegó a la catedral de Quito después de la visita de cortesía al presidente ecuatoriano, Rafael Correa, en el palacio de Carondelet. Correa se despidió del papa en el patio del palacio presidencial y Francisco recorrió a pie los 50 metros que le separan de la catedral de Quito.
Hoy Francisco, tendrá un día muy agitado, regresará al centro histórico de Quito para rezar en la conocida iglesia de la Compañía de Jesús, un templo del siglo XVIII perteneciente a la escuela del barroco español y que está en la lista de lugares protegidos de la UNESCO, y que lleva el nombre de la orden jesuita a la que pertenece Francisco.
Hacia el mediodía, una multitud lo esperará en el enorme Parque del Bicentenario para oficiar misa. Mañana miércoles parte hacia Bolivia y luego visitará Paraguay.
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