La ex presidenta podría perder sus fueros legislativos si fuera procesada

Al citarla a indagatoria, el juez federal Claudio Bonadio está en condiciones de complicar aún más a Cristina Kirchner. Si finalmente resolviera procesarla por el presunto encubrimiento de Irán en el atentado contra la AMIA, la ex presidenta estaría cerca de perder los fueros que adquiriría como senadora tras las elecciones legislativas del 22 del actual.

«Este caso (el del encubrimiento de Irán) es de muchísima mayor envergadura que cualquiera de las causas de corrupción que enfrenta Cristina -sostiene Elisa Carrió, líder de la Coalición Cívica-. Acá lo que se investiga es el encubrimiento de un país terrorista por perpetrar el atentado contra la AMIA, con la muerte de un fiscal (Alberto Nisman) en el medio. Se la puede acusar por traición a la patria. La presión internacional va a ser insostenible si la Justicia finalmente la procesa; va a ser muy difícil no aprobar el desafuero.»

La ex presidenta deberá declarar el 26 del actual, cuatro días después de que, seguramente, resulte elegida como senadora (ya sea por la mayoría o por la minoría), con lo que llegará a los Tribunales con sus fueros. Después de escuchar su testimonio, el juez resolverá sobre el eventual procesamiento y si incorpora al delito de encubrimiento el de traición a la patria.

El fiscal Nisman había dicho que la ex presidenta había impulsado la firma del tratado con Irán para lograr la caída de los pedidos de captura internacional de la Interpol contra los iraníes que planificaron la voladura de la AMIA.

El horizonte se avizora incierto para la ex presidenta. «Con un posible procesamiento por traición a la patria y el pedido de desafuero de un juez, los peronistas en el Senado difícilmente tengan margen para proteger a Cristina», vaticinan en el oficialismo.

Lo cierto es que, sin un pedido expreso de desafuero de un juez, difícilmente el Senado avance en la exclusión de Cristina Kirchner.

«Éste es un cuerpo corporativo; de eso puede dar fe Carlos Menem. Gracias a la defensa que ejercieron los senadores peronistas y pese a tener una condena en su contra, podrá renovar su mandato y sus fueros en estas elecciones», se resignan los oficialistas en la Cámara alta.

Según la óptica de Carrió, la cuestión cambiaría sustancialmente si el juez Bonadio decidiera procesar a la ex presidenta y, a la vez, solicitara su desafuero.

¿Qué actitud tendría el bloque de senadores peronistas en este caso? «Por ahora todo es futurología. Hay que ver si eso sucede, todavía falta mucho. Hay que esperar. No estamos analizando ninguna hipótesis», se limitan a decir, en tono parco, en el entorno de Miguel Pichetto, jefe del bloque de senadores del PJ.

Quien sí tendría el camino más allanado hacia su desafuero en la Cámara de Diputados es el ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido. El actual legislador kirchnerista aguarda, expectante, lo que resolverá la Cámara Federal este mes sobre el pedido del fiscal Germán Moldes, quien reclamó su desafuero por presuntos sobreprecios en la reactivación de la mina de Río Turbio en Santa Cruz.

Carrió se frota las manos. «Ya sea por la vía del desafuero pedido por un juez o por la vía de la expulsión, vamos a ir a fondo otra vez contra De Vido en diciembre», enfatiza.

Fuente: La Nación