Cristina desorienta, Bullrich acelera y Larreta espera el milagro Schiaretti

Como nunca, ásperas negociaciones, operaciones cruzadas y posturas que parecen irreconciliables, son el denominador común de la cuenta regresiva al cierre de listas del próximo sábado. La dirigencia política deja en evidencia la crisis terminal que atraviesa el actual sistema político. Dominado en la última década por dos coaliciones que tienden a crujir y sin liderazgos indiscutibles, era de prever que el escenario se transformara en una lucha de egos y pases de factura que no registran antecedentes.

Si bien es cierto que nunca la rosca previa a los cierres de lista fue un juego de caballeros, es inusual el espectáculo que dan los políticos en un clima de época donde la sociedad no los quiere. Es ya famosa la anécdota de aquel operador que deja en un café a sus aliados para presentar sus pretensiones y cuando regresa les dice “nos cag….., voy número cuatro”. Pero en ese entonces no había redes sociales, ni hartazgo e impaciencia en la opinión pública.https://cfde83081ed57bf81bb3c0baf5892b2b.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-40/html/container.html

Lo concreto es que la crisis del oficialismo se agudizó en las últimas horas con la novedad de una competencia en la primaria presidencial que parecía poco probable. Daniel Scioli se plantó y hasta ahora le viene torciendo el brazo a Máximo Kirchner. Logró mantenerse de pie y en el centro del ring. Pero eso no asegura su competitividad en las PASO y si tendrá la estructura y los recursos para pelearle al kirchnerismo, sobre todo en la provincia de Buenos Aires, donde los Barones del conurbano están siendo presionados para que se suban a la boleta del motonauta ¿Podrá llegar con su intención de competir hasta el sábado próximo?

El dato central es que Cristina Fernández de Kirchner se ha corrido de la operación diaria. Evidentemente decirle que no a Máximo es mucho más sencillo que hacerlo frente a la vicepresidenta. Anoche se decía que salían a la cancha Eduardo Wado de Pedro versus Scioli y Axel Kicillof tendría que enfrentar a Victoria Tolosa Paz. La pregunta del millón sobre ese supuesto armado es dónde jugaría Sergio Massa. O, mejor dicho, cómo le “pagarán” políticamente un eventual renunciamiento. No parece sencillo. El ministro de Economía está realmente obsesionado con una nueva candidatura presidencial.https://cfde83081ed57bf81bb3c0baf5892b2b.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-40/html/container.html

Hasta ahora se seguía especulando con la bendición a Wado y un Kicillof aliviado por no tener que jugar en la categoría presidencial. Pero todo puede pasar. Así como Scioli pelea, A esta altura los habituales interlocutores de la vice están desorientados porque la ven activa pero más hermética que de costumbre. A su vez, Massa está dispuesto a no dejar pasar este turno electoral. Cristina Kirchner, Alberto Fernández y el titular del Palacio de Hacienda consideran que sólo tienen una certeza de acuerdo a la misma encuesta que reciben semanalmente: un triunfo de Patricia Bullrich sobre Horacio Rodríguez Larreta en las PASO de Juntos por el Cambio.NOTICIAS RELACIONADAS

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Ese pronóstico entusiasma a todos los sectores en pugna del oficialismo porque consideran que Bullrich es la candidata opositora con menos margen para crecer en las generales de octubre y, fundamentalmente, en el ballotage. En los diferentes campamentos de la coalición gubernamental expresan entusiasmo porque le temen más a Rodríguez Larreta. El jefe de Gobierno porteño es percibido como un candidato débil para superar las PASO porque no es muy popular en la base electoral de Juntos por el Cambio, pero mucho más competitivo que Bullrich si lograr llegar a octubre.

Hacen hincapié en que su moderación lo puede beneficiar entre el voto blando que perdió el FdT. Sostienen que esos votantes que pueden llegar a ser decisivos no optarían por la exministra de Seguridad en una segunda vuelta. Si fuera así, se ven venir un escenario electoral más atractivo. Voluntarioso como siempre, el ministro de Economía asegura que si la ganadora de la primaria de JxC llegara a ser la presidenta del PRO, él está en condiciones de ir a pescar entre los votantes de su amigo Rodríguez Larreta.

Uno de los argumentos que plantea es que su figura es más moderada que la de Wado de Pedro y Axel Kicillof. Se refiere a que es más fácil para un radical progresista o simpatizantes de Elisa Carrió y Margarita Stolbizer votar por el titular del Palacio de Hacienda ante el rechazo que les genera Bullrich y el padrinazgo que ostenta Mauricio Macri. A esos votantes quizás les costaría más inclinarse por una boleta donde aparezcan referentes tan cristinistas como el ministro del Interior y el gobernador de la provincia de Buenos Aires. Igual, puede pasar cualquier cosa.

Pelea en Juntos por el Cambio

En la vereda de enfrente se percibe cómo Patricia Bullrich acelera en la provincia de Buenos Aires sabiendo que gran parte de su suerte se define en ese territorio. En el arranque del año pasado sólo contaba con el respaldo del intendente de Capitán Sarmiento, Javier Iguacel, y el grupo de amigos de Esteban Bullrich, Ramón Lanús, Pablo Walter y Juan Pablo Allan. Actualmente cuenta con Néstor Grindetti, Cristian Ritondo, Joaquín De la Torre, los hermanos Passaglia de San Nicolás y un grupo de intendentes que dejaron el larretismo como Héctor Gay, de Bahía Blanca, o Mariano Barroso, de 9 de Julio.

Paralelamente, en fuentes del bullrichismo aseguran que se ha cerrado un acuerdo de superestructura con el radicalismo bonaerense. Sólo falta definir las alineaciones. Maxi Abad, presidente del Comité Provincia de la UCR, es una fija para ser compañero de fórmula de la exministra de Seguridad. Tiene el aval del ala política que componen Grindetti y el armador Sebastián García De Luca. Pero el consultor de comunicación y análisis de opinión pública de la candidata Derek Hampton pone reparos y se inclina más por un economista joven. Una incógnita que aún no definió Bullrich.

El consejo de su propio Marcos Peña no significa que apunte a perfiles como Carlos Melconian o Ricardo López Murphy. Trascendió ayer que Melconian se había negado a integrar la fórmula de la presidenta del PRO. Rápidamente desde el bullrichismo se negó categóricamente esa versión y también desde el entorno del economista fanático de Racing. “Cómo va a decir que no a una propuesta que Patricia nunca le hizo, esa operación viene del larretismo”, comenta a MDZ un allegado a la candidata.

En la sede gubernamental porteña de la calle Uspallata se respira un clima de optimismo por el triunfo de Claudio Poggi en San Luis, un resultado que en el larretismo interpretan que le da la razón a su reclamo airado de ampliación. También guardan una esperanza sobre la inclusión de Juan Schiaretti al binomio presidencial de Horacio Rodríguez Larreta. “No será fácil, pero vamos a seguir intentando hasta el sábado próximo”, revela una fuente del Ejecutivo de la Ciudad de Buenos Aires. Hasta el momento sigue mejor posicionado Gerardo Morales como vice.

Al mismo tiempo no dejan de observar detenidamente lo que está ocurriendo en la provincia de Buenos Aires con el avance de Bullrich. Uno de los trascendidos que circulaba anoche indicaba que José Luis Espert no sería candidato presidencial porque lo prefieren como primer senador nacional. Después de analizar las encuestas que administra Federico Di Benedetto, llegaron a la conclusión de que el diputado y economista les aporta más en la segunda parte de la boleta en la provincia de Buenos Aires. También se comentaba que la lista de diputados nacionales podría ser encabezada por Silvia Lospenatto o Miguel Pichetto.

Diego Santilli, por su parte, busca un compañero de fórmula. Descartado Martín Tetaz, los radicales aliados al larretismo en territorio bonaerense sólo tienen para ofrecer a Gustavo Posse, quién tiene una dura competencia interna contra Bullrich. La candidata se está imponiendo en ese distrito y puede traccionar a Ramón Lanús, el precandidato a intendente. Posse es un profesional en el complicado arte del corte de boleta y delivery. Al parecer, la gran obsesión de Santilli es formar la dupla con Guillermo Montenegro, el intendente de General Pueyrredón. Quienes han conversado con el marplatense revelan que no le interesa ese ofrecimiento.

Y, como si esto fuera poco, Javier Milei busca con ansiedad un candidato a gobernador luego del fracaso de las negociaciones con el intendente de Chivilcoy, Guillermo Britos, quien ahora se encuentra negociando con Santilli para poner a su esposa al frente de la lista de legisladores de la Cuarta Sección Electoral. Iguacel y Ritondo aseguran haber recibido el llamado del libertario con ofrecimiento incluido. Anoche se especulaba con el intento de convencer a Carolina Píparo. Ella se muestra más entusiasmada con competir por el municipio de La Plata. Se vienen días enteros de rosca y operaciones cruzadas donde todo puede ocurrir.

Fuente: Mendoza online