Bebote Álvarez testificó contra Moyano en la investigación por lavado

Durante tres horas, bajo juramento, el barrabrava de Independiente Pablo «Bebote» Álvarez volvió ayer a señalar a Hugo y a Pablo Moyano como presuntos autores de maniobras para lavar dinero a través de la estructura del club Independiente.

Bebote declaró como testigo ante el juez federal de Quilmes Luis Armella, en un acto que resultó un insumo clave para motorizar este expediente que investiga si Moyano blanqueó dinero, un delito federal. Según señalaron fuentes judiciales a LA NACION, Álvarez «ratificó y amplió» los dichos de la declaración indagatoria que brindó a fines del año pasado en la Justicia ordinaria.

«Álvarez reiteró sus afirmaciones y aportó nuevos elementos, datos y nombres que, de ser ciertos, son contrastables», explicaron los portavoces judiciales.

La causa de Armella nació como un desprendimiento del caso que instruye el juez de garantías de Lomas de Zamora Gabriel Vitale, que ordenó detener a Álvarez y a otros miembros de la barra brava de Independiente como miembros de una presunta asociación ilícita. En esa causa Bebote involucró a los Moyano en diversas operaciones de lavado, por lo que Vitale remitió ese tramo a Armella. La fiscal federal de Quilmes Silvia Cavallo ya imputó a los Moyano por «haber montado una estructura, dentro de Independiente, destinada a cometer delitos».

Acusaciones

Con un block de apuntes en sus manos, Bebote salió de la alcaidía del penal de Melchor Romero, donde está detenido, y fue trasladado al juzgado de Armella. Tras pedir protección judicial, declaró frente al magistrado, a un secretario judicial y al abogado de Hugo Moyano, Daniel Llermanos.

Según pudo conocer LA NACION, Álvarez reiteró ayer que en Independiente se inflaron valores de contratos por la compra de jugadores. También se refirió a la contratación de la empresa de turismo Martín Tur, que habría sobrefacturado viajes de Independiente al interior del país y al exterior. Los pagos de esos trayectos se habrían efectuado con cheques de Camioneros y -según Bebote- la diferencia con el valor real habría retornado a los bolsillos de Pablo Moyano.

Para Llermanos, «toda la declaración de Álvarez carece de relevancia porque no acompañó pruebas y reconoció que obró por resentimiento personal contra Moyano». Para el abogado, no será necesario presentar contrapruebas, ya que el barrabrava «no brindó datos concretos y solo buscó mejorar su situación judicial». Fuentes cercanas a los investigadores, sin embargo, aseguraron que Bebote confirmó sus dichos como imputado y ofreció «datos contrastables».

Ante el juez Vitale, y según consta en la imputación que hizo la fiscal Cavallo, Álvarez se había referido a la operatoria de la constructora Aconra SA, de Liliana Zulet, pareja de Moyano. El barrabrava describió que Pablo Moyano (a quien llamó «el salvaje») le habría contado que extorsionó a grandes empresas de acero y hormigón para conseguir materiales para terminar una garganta y una platea en el estadio de Independiente. Agregó que esos insumos habrían sido facturados por la empresa de Zulet para blanquear fondos por bienes que no se prestaron.

Según fuentes vinculadas a la causa, Álvarez también dijo que se habría utilizado una cuenta bancaria en el exterior y una mesa de dinero del microcentro (Global Finanzas SA, según la imputación de Cavallo) para desviar a las arcas de los Moyano dinero obtenido por pases de jugadores a Europa.

Álvarez también denunció que se habría simulado la contratación del catering para los palcos de Independiente por $160.000 a la Panadería del Valle. Por esta sospecha, la fiscal Cavallo imputó a Héctor «Yoyo» Maldonado, un dirigente cercano a Moyano vinculado a esa panadería.

Con la testimonial de Álvarez, la causa que tiene Armella podrá tener vuelo propio, más allá del devenir del expediente que se tramita en Lomas de Zamora. Esa causa está a la espera de una resolución de la Sala II de la Cámara de Apelaciones, que debe definir si confirma o no el procesamiento de Bebote.

Fuentes judiciales confirmaron que Armella ordenará una serie de medidas y citará a testigos para investigar los dichos de Álvarez. También le envió un oficio al juez Vitale para que arbitre los medios necesarios para proteger al barrabrava que se convirtió en testigo.