10/12/2025 05:45
El reciente decreto del Gobierno sobre celulares —aplicable desde su publicación— prevé un cronograma de quita de aranceles que llevará el Derecho de Importación Extrazona del 8% actual al 0% a partir del 15 de enero de 2026.
En teoría, esto debería generar una baja en los precios de los smartphones. Sin embargo, ese alivio ya quedó neutralizado por un fenómeno internacional que excede por completo al mercado local: la crisis global de memorias DRAM y NAND.
Durante las últimas semanas circuló la idea de que los celulares bajarían cerca del 40% por los cambios impositivos. Pero las empresas del sector aclaran que la reducción real será del 8%, solo aplicable a equipos importados, y que recién se sentirá desde mediados de enero. Aun así, esa mejora se vuelve escasa frente al incremento explosivo en el costo de las memorias que usan todos los celulares.https://3f98fa954869d10590dce346bada826d.safeframe.googlesyndication.com/safeframe/1-0-45/html/container.html
IA vs. smartphones: todos compiten por lo mismo
La memoria flash NAND permite guardar fotos y videos en el celular. (Foto: Kingston)
Las compañías vinculadas a la inteligencia artificial —desde NVIDIA hasta fabricantes de infraestructura como Western Digital— están comprando masivamente DRAM y 3D NAND, los dos tipos de memorias esenciales para alimentar los centros de datos donde se entrenan los modelos de IA. La DRAM es clave para ejecutar procesos; la NAND, para almacenar enormes volúmenes de información.
Este acaparamiento genera un cambio estructural en la industria. Las fábricas están destinando cada vez más capacidad a producir HBM, la memoria de alto ancho de banda utilizada por los aceleradores de IA, lo que reduce la oferta de memorias tradicionales como DDR y LPDDR, las que usan los celulares. Esa reconversión ya disparó los precios y las proyecciones indican que lo peor aún no llegó.
El resultado ya se siente: según TeamGroup, uno de los mayores fabricantes del sector, los precios de contrato de DRAM y 3D NAND aumentaron entre 80% y 100% en diciembre. Y los valores del mercado lo confirman. Un chip DDR5 de 16 GB, que en septiembre costaba 6,84 dólares, pasó a 24,83 dólares en noviembre y ya ronda los 27,2 dólares a comienzos de diciembre, con picos que llegaron a 37 dólares.
A esto se suman anuncios de las coreanas Samsung y SK Hynix —dos de los mayores productores del mundo— que anticiparon subas de hasta 30% en DRAM y NAND para el último trimestre de 2025. Analistas internacionales detectan incluso aumentos de hasta 500% en ciertas memorias para servidores y faltantes crecientes en el canal de consumo.
“Hay una demanda que avanza demasiado rápido contra una oferta sin capacidad de reacción para el fenómeno. Esto empezó en septiembre. Y todos los actores de IA invierten a una velocidad que es muy difícil de seguir”, sostuvo Jean-Pierre Cecillon, Director de Kingston Sudamérica, otro de los fabricantes de memorias a nivel mundial.
En paralelo, algunos fabricantes de celulares apuntan a OpenAI, la empresa detrás de ChatGPT, como una de los grandes responsables del faltante. Los modelos de IA consumen cantidades inéditas de memoria, y buena parte de la DRAM que usan los servidores es la misma que se instala en celulares, notebooks, consolas, placas de video y SSD. Todos compiten por el mismo recurso, empujando el precio.
Buena parte de la DRAM que hoy usan los servidores de entrenamiento es exactamente la misma que se instala en celulares de gama media y alta (6, 8, 12 o 16 GB), notebooks, consolas de videojuegos, placas de video y hasta discos de estado sólido (SSDs). Ese acaparamiento disparó un aumento global en los precios que ya se traslada a las cadenas de producción de celulares.
Qué pasará con los precios de los celulares en Argentina
iPhone Air, uno de los últimos modelos presentados por Apple. (Foto: Bloomberg)
La baja de aranceles para la importación de celulares ya generó algunos descuentos desde mitad de año, especialmente en marcas como Motorola, Realme y Samsung, además de los revendedores oficiales de Apple. La reducción del arancel del 16% al 8% y la baja de los impuestos internos del 19% al 9,5% fueron claves para ese alivio parcial.
El Decreto 333/2025 buscó reforzar esa tendencia: fijó una alícuota del 8% del DIE para teléfonos inteligentes y estableció que bajará a 0% en enero de 2026. En condiciones normales, esta rebaja debería traducirse en precios más accesibles. Pero esta crisis global es tajante: si sube la memoria, sube el precio del celular.
Los fabricantes prevén que la presión sobre los costos continuará durante todo 2026. Algunas estimaciones internas hablan de aumentos del 40% al 50% en el costo de las memorias DRAM y NAND, un impacto directo en el precio final del smartphone. Por eso, aun con la baja del 8%, el consumidor argentino difícilmente verá una reducción real en las góndolas.
Las fábricas de Tierra del Fuego ya negocian con el Gobierno nuevas escalas de costos para poder sostener modelos de 64 GB, 128 GB y 256 GB, cuyos valores dependen casi por completo del mercado internacional de memorias.
Esto no afecta solo a la Argentina. Quien viaje al exterior también encontrará notebooks, celulares y consolas más caras en 2025 y 2026. Las PC ya proyectan aumentos para fin de año; las placas de video (GPU) sumarán entre 15 y 30 dólares extra solo por el costo de la memoria; y los discos de estado sólido (SSD) subirán durante el primer trimestre.
Es más, la industria reconoce que podría ser la mayor crisis de memoria en 30 años.
¿Cuánto durará la crisis global de memorias?
Si sube el precio de la memoria, sube el precio del celular. (Foto: Bloomberg)
Gerry Chen, director general de TeamGroup, anticipa que la disponibilidad de DRAM y NAND empeorará en el primer y segundo trimestre de 2026, cuando se agoten las reservas de distribución. “Obtener asignación será difícil, incluso pagando más”, advierte.
Aunque algunas voces creen que este boom podría estabilizarse dentro de un año, los más escépticos temen que dure más si la inversión en IA sigue creciendo al ritmo actual.
Fabricantes chinos de memorias ya reconocen que en 2026 deberán reducir volúmenes de producción porque no logran abastecer a todos los segmentos del mercado. Incluso comparan este escenario con la crisis de 2020-2021 por la minería de criptomonedas: una sola tendencia global distorsionó el mercado entero.
En paralelo, algunas marcas evalúan impulsar el almacenamiento en la nube a modo de paliativo, para reducir la necesidad de vender modelos con 256 GB o 1 TB; aunque esto implique cambiar hábitos de uso y asumir un costo mensual que muchos usuarios no están dispuestos a pagar.
SL
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Redactor de la sección Tecnologíahmarmol@clarin.comBio completa
Fuente: Clarín.com
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