Jorge Macri movió primero. Después de haber decidido el adelantamiento de los comicios locales para el 6 de julio próximo, en los que se renovarán 30 escaños en la Legislatura, el jefe de gobierno porteño dio anteayer el puntapié inicial en la disputa electoral por el control de la Capital, el histórico bastión de Pro, con un acto militante en el barrio de Villa Pueyrredón.
El alcalde se subió al escenario montado en el club deportivo 17 de Agosto unas horas después de que su primo Mauricio Macri, titular de Pro, aceptara negociar una alianza con Javier Milei en las próximas legislativas. En su respuesta al Presidente, Macri propuso armar una mesa de diálogo y seleccionó a cinco dirigentes de su fuerza para discutir los términos del eventual entendimiento.
El intercambio amistoso entre Macri y Milei alteró los ánimos de los aliados de Pro en la ciudad de Buenos Aires. Es que el jefe porteño viene tejiendo para garantizarse la continuidad del esquema de alianzas del extinto Juntos por el Cambio -sobre todo, con la UCR y la Coalición Cívica- en el distrito porteño. Ese diseño político y electoral que heredó de su antecesor, Horacio Rodríguez Larreta, le permitió hasta ahora asegurar la gobernabilidad en la Legislatura, donde lidia con un escenario muy fragmentado.
A sabiendas de que los libertarios que responden a Karina Milei y Santiago Caputo, los arquitectos políticos de Milei, se alistan para dar batalla por el poder en la elección local, Jorge Macri requiere aunar fuerzas para evitar una derrota en las urnas frente a sus rivales que le quite legitimidad y lo deje en una situación de fragilidad en el parlamento capitalino, donde no tiene una mayoría propia y debe hacer equilibrio para sacar las leyes.
“No aceleren que hay curvas. Todavía no hay un acuerdo con Milei a nivel nacional”, transmitió Jorge Macri a sus socios locales antes de pararse detrás del atril en Villa Pueyrredón.

A lo largo de su discurso del jueves último, el jefe porteño no dejó resquicio para las intrigas: arremetió contra La Libertad Avanza (LLA), dijo que el Pro “lidera” en la Ciudad y que no aceptará que “nadie” le marque la agenda. En su arenga a los feligreses amarillos y funcionarios porteños, remarcó sus diferencias con los “valores” y “principios” del modelo libertario: “Nosotros no dejamos a nadie atrás y el que piensa distinto no es nuestro enemigo; no creemos en el pensamiento único”, puntualizó.
Con un tono desafiante, Jorge Macri, uno de los que presiona para que Pro tome distancia de la Casa Rosada, preserva la identidad y exhiba vocación de poder ante los desplantes de la mesa chica de Milei, activó una suerte de operativo clamor para su primo se ponga al frente de la tropa amarilla y acepte postularse a senador en la Capital. “Guarda que se viene Mauricio candidato”, lanzó.
¿Macri puede ser candidato?
La eventual postulación de Macri es una de las grandes incógnitas electorales con las que arranca la contienda entre Pro y LLA en la ciudad. Pese al deseo del jefe porteño de jugar esa carta, Macri por ahora envía señales de que no está dispuesto a volver al ring y pelear por una de las tres senadurías que se ponen en juego este año en la ciudad. En su entorno admiten que no ya no lo descarta, pero ocupar una banca en el Congreso y regresar a la política activa no lo desvela. Entre sus leales hay quienes comienzan a deslizar que debería poner el cuerpo en caso de que se frustren las tratativas para sellar una alianza con Milei.

Los armadores libertarios, entre tanto, mantienen su idea de promover las candidaturas de Manuel Adorni o Patricia Bullrich, quien preferiría permanecer en el Poder Ejecutivo, aunque admite que no tendría chances de esquivar el desafío si Milei se lo pide. En el ecosistema de LLA también circuló la posibilidad de que Soledad Acuña, exministra de Larreta, se sume al lote de posibles candidatos. Acuña está enemistada con Jorge Macri -ya criticó su gestión en Educación- y tiene nexos con la galaxia violeta. Manuel Vidal, su mano derecha, trabaja con Caputo. Además, Diego Kravetz, su esposo, acaba de desembarcar en la gestión de Milei como el nuevo “señor 8″ de la SIDE.
En Balcarce 50 gusta su perfil de “halcón”, aunque los karinistas por ahora relativizan sus chances. Eso sí: tanto Caputo como Karina Milei, dicen en LLA, están dispuestos a jugar fuerte en la elección local de la Capital después de que Jorge Macri decidiera separar los comicios sin consensuar. Lo interpretaron como una señal de guerra. Por caso, Pilar Ramírez, delegada de “El Jefe”, en la Legislatura criticó en las últimas horas los anuncios de Jorge Macri orientados a lograr una rebaja de la presión impositiva y pidió que Pro acompañe la ley bases porteña para achicar estructuras del Estado.
¿Se adelanta la disputa?
Si bien Jorge Macri fijó la elección porteña para el 6 de julio -las PASO están previstas para el 27 de abril-, la fecha del posible choque entre Pro y LLA podría adelantarse para mayo o junio. Es lo que piden un sector del peronismo -ligado a Juan Manuel Olmos– para acompañar el proyecto de suspensión de las PASO que el jefe porteño prometió enviar a la Legislatura para que sea debatido en sesiones extraordinarias. Para sacar las primarias, el macrismo requiere reunir 40 voluntades -una mayoría agravada- y, esencialmente, depende del visto bueno de Unión por la Patria. En el peronismo, donde Leandro Santoro asoma como opción para jugar en el comicio local, dado que anhela desbancar a Jorge Macri en 2027, cree que es necesario adelantar la cita para mayo para que no se mezcle con la discusión nacional. En Uspallata analizan esa alternativa. A su vez, analizan alternativas de eventuales candidatos a legislador: “No sabemos si será bien amarillo, pero debe ser alguien ligado a la gestión”, arriesga uno de los consejeros de Macri.
Si Jorge Macri logra su cometido, la elección podría coincidir con el momento de arranque de la negociación entre Pro y LLA sobre una alianza a nivel nacional. Es que cerca de Milei dejan trascender que no tienen apuro en sentarse en la mesa de diálogo que propuso Macri y postergan la discusión sobre el armado de listas para abril o mayo.
Por lo tanto, los Macri se juegan un pleno. Un triunfo en su bastión los fortalecería en la negociación con Milei. En cambio, una derrota les quitaría aún más poder de maniobra para discutir condiciones y lograr puestos codiciados para los suyos. “No podemos garantizar un resultado; hasta podríamos salir terceros”, dicen un alto mando de Pro que cuestionó internamente la decisión de Jorge Macri de desdoblar.
¿Los radicales y Carrió, aliados de Macri?
En la alquimia electoral que prepara para “defender” la ciudad de la avanzada libertaria, Jorge Macri apuesta a preservar el acuerdo con los radicales y la CC, de Carrió. El jefe porteño tiene un vínculo estrecho con Daniel Angelici, quien controla el comité porteño a través de Martín Ocampo. Angelici y Ocampo son socios de Emiliano Yacobitti y Martín Lousteau. “Si Pro juega con LLA, vamos solos”, le avisaron los radicales de Angelici a Jorge Macri. Ese grupo también tendió puentes con Graciela Ocaña (Confianza Pública).¿ALIANZA LLA-PRO? QUÉ SE JUEGAN LOS GOBERNADORES Y CÓMO SE PARAN FRENTE AL POSIBLE PACTO
Lousteau insiste en que aún no definió su estrategia y sus colaboradores evitan dar pistas sobre si ansia entrar en la disputa por renovar su banca o no. En la tropa de Yacobitti apuestan a que al menos lo intente. Por ahora, remarcan que delinearán su hoja de ruta con el objetivo de que “ni Milei ni el kirchnerismo ganen en la ciudad”. “Está todo abierto y podemos ir juntos o separados, pero dependerá de qué hace el Pro”, señalan. Parece difícil que Macri y Lousteau puedan volver a convivir en el mismo espacio. Cerca de los Macri deslizan que podrían aunar fuerzas incluso compitiendo en listas separadas.

En la CC también levantan la guardia. Carrió amaga con anotarse en la contienda porteña, pero tampoco descarta por ahora postularse en Buenos Aires. Facundo del Gaiso, uno de sus leales en la Legislatura, vaticinó la extinción de Pro después de que Macri aceptara negociar con Milei. “Pro ha muerto. Es el momento de construir algo nuevo para cuidar a la Ciudad, por fuera de Milei y el kirchnerismo, que represente a los sectores medios, los jubilados y las pymes”, señaló Del Gaiso en la red “X”. De inmediato, Jorge Macri buscó contenerlos. Carrió ya le hizo saber a Macri que compartan o no una coalición en 2025, lo ayudarán a preservar la gobernabilidad a partir del año próximo. “Si los libertarios atacan la ciudad, la vamos a defender”, dicen.
¿Larreta juega por fuera de Pro?
Si Larreta ya se sentía lejos de Pro, el mensaje que publicó Macri en sus redes para contestarle a Milei su idea de hacer un acuerdo “total” para enfrentar al kirchnerismo en las legislativas no hizo más que terminar de confirmar sus sospechas. Es que el exjefe porteño presume que Macri y Milei terminarán cerrando un pacto. Por un lado, cree que el expresidente debe evitar que Pro se exponga a una muy mala performance en las urnas que le quite aún más poder de influencia en el nuevo tablero político. Además, especula con que LLA requerirá de una alianza con Macri para no dividir a la oposición a Axel Kicillof e impedir un eventual triunfo del kirchnerismo en la provincia. Ese escenario podría amenazar la estabilidad del plan económico de Milei.
Larreta no quiere dar indicios de sus próximos pasos. ¿Reflotará el diálogo con Lousteau y Yacobitti? ¿Armará una tercera vía con Juan Schiaretti, con quien habla con frecuencia? Nadie sabe qué pretende, incluso, entre sus ex-aliados. Por ahora, machaca con que la próxima campaña será de personas, no de partidos. Por eso, quiere recuperar su capital político y resaltar su rol de gestor. Volvió entusiasmado de su mini-gira por la costa bonaerense y retomó las recorridas por los barrios. “Horacio no está de acuerdo con entregarle el Pro a Milei; lo dijo hace un año y sigue pensando lo mismo”, dicen los suyos. Tras el desdoblamiento, evalúa la alternativa de presentarse en la elección local -es muy crítico de Jorge Macri- o competir por fuera de Pro en la elección nacional como diputado o senador. Salvo que Macri rompa con Milei, parece difícil que pueda volver a las filas amarillas. Planea definir recién en marzo o abril si jugará o no y en qué lugar. “En donde juegue, tiene que ser un partido para ganar; no puede volver a perder”, asumen en el larretismo.

¿Marra tendrá lugar en LLA?
En Pro también siguen de cerca los pasos del legislador Ramiro Marra, uno de los precursores del armado de LLA en la ciudad, quien fue marginado tras sus cortocircuitos con Karina Milei. Marra termina su mandato en diciembre e intenta posicionarse con un discurso anti-kirchnerista. En silencio, procura acumular un caudal político propio para llegar fortalecido a la negociación por las listas. A diferencia de Ramírez, opta por un perfil cooperativo con Jorge Macri en la Ciudad.
Los libertarios que reportan a Caputo visualizan un riesgo: que Pro estimule el armado de una lista libertaria blue que le quite votos a LLA. Por lo pronto, Yamil Santoro (Republicanos Unidos) anticipó que intentará edificar un frente liberal para competir en la elección local.

Por Matías Moreno
Fuente: La Nación
Sea el primero en comentar en "Se desata la pelea por la Capital: las grandes incógnitas electorales con las que arranca la puja de poder entre Pro y LLA"