Patricia Bullrich define el futuro de Horacio Rodríguez Larreta en la campaña

En Juntos por el Cambio el resultado terminó de dividir las aguas entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta. La ex ministra de Seguridad se quiere posicionar como la conductora de la coalición opositora, mientras que el jefe de Gobierno, vencido en la interna, define su lugar dentro del espacio. Será Bullrich quién defina en qué momento y de qué forma Larreta aparezca en la campaña.

El miércoles Rodríguez Larreta y Bullrich se reunieron en el Jardín Botánico con los principales asesores políticos de cada uno de los espacios. Allí el jefe de Gobierno se puso a disposición de la vencedora y acordaron que las apariciones en conjunto durante la campaña serán muy escuetas en algunos lugares donde los estudios de opinión pública indiquen que la presencia de Rodríguez Larreta favorezca a Bullrich.

Mientras tanto, los principales asesores políticos de Rodríguez Larreta, que encabeza Eduardo Machiavelli en todo el país, junto con el delfín radical de Gerardo Morales, José Cano, ya trabajan en la articulación de los equipos  de campaña. El delegado de Bullrich para esa tarea es Damián Arabia, uno de los jóvenes que armó la campaña de Patricia Bullrich y ya piensa de cara a la elección general de octubre.

Un rato antes de aquel encuentro Rodríguez Larreta juntó a su equipo para una reunión de Gabinete en el Centro Cultural Recoleta. “Triste y enfocado”, comentó a MDZ una de las personas que participó del encuentro, sobre el estado del jefe de Gobierno. ¿La relación con Bullrich? “Tensa, pero se va a ir acomodando”, deslizó. Unos días después de la derrota electoral, reflexionaron: “No alcanzó con la moderación para contener un clima de época que va hacia los extremos”.

“En las últimas semanas veníamos levantando, pero con la agenda de la Seguridad Patricia (Bullrich) nos pasó por encima”, le dijo a este medio una de las personas que trabajó toda la campaña al lado de Rodríguez Larreta.NOTICIAS RELACIONADAS

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En el campamento bullrichista no hay una postura unánime sobre qué hacer con el jefe de Gobierno. Algunos sostienen que no tiene que aparecer nunca más en la campaña y limitarse a gobernar la Ciudad de Buenos Aires. ¿Y después? “Lo mandamos a la Embajada de Uganda, y a las dos semana la cerramos”, dijo uno de los más antilarreta. Sin embargo, primó la decisión de los más moderados y apuntan a que el jefe de Gobierno trabaje sólo en lo que se le pide, y nada más. “Quedó claro que Patricia (Bullrich) lidera”, insisten.

La primera lectura es que el jefe de Gobierno no sacó un porcentaje de votos que le permita fijar bases y condiciones en la campaña, distinto a lo que pasó en la interna bonaerense de 2021 entre Diego Santilli y Facundo Manes. La derrota por más de cinco puntos lo obliga a seguir los lineamientos que baje el ala ganadora. “Si él en vez de 11 puntos, sacaba 13, éramos la coalición más votada y favoritos para octubre, pero no fue así. Ahora que siga el rumbo que nosotros marcamos”, analizaron cerca de Bullrich.

Un capítulo aparte en la conexión de puentes entre bullrichistas y larretistas se da en el Congreso. El debate por la Ley de Alquileres pone nuevamente en el centro de atención a los extremos y los moderados. Cerca de Bullrich insistían en avanzar directamente en la derogación, en un contexto donde este tema fue uno de los de la campaña. Mientras que los otros sostenían la necesidad de avanzar en la desregulación de la norma vigente, pero que quede algún marco normativo.

Finalmente decidieron no derogar, ya que se necesita llevar nuevamente el tema a las comisiones para dictaminar, y eso puede tardar varias semanas, pero eliminar directamente los plazos de aumento. Así resolvieron modificar el dictamen de minoría que firmaron hace más de un año y mantener una postura en conjunto para cambiar la ley.

En este contexto, se espera que el jefe de Gobierno porteño baje su perfil en las próximas semanas, y reaparezca en algunas oportunidades que el equipo de Bullrich le pida puntualmente.

Fuente: Mendoza online